Guatemala, jueves 01 de marzo de 2007



Nacionales
Cancerología, con equipo antiguo Aparatos de radioterapia tienen más de 30 años
Por: Alberto Ramírez

PERIODISMO COMUNITARIO
Los equipos de radioterapia del Instituto Nacional de Cancerología (Incan) llegaron al final de su vida útil, y ahora las autoridades buscan apoyo internacional para renovarlos antes de que se produzca una crisis que afecte a los más de 20 mil pacientes que utilizan esos servicios.
Walter Guerra, director del Incan, afirmó que el hospital tiene tres aparatos: uno es para dar radioterapia superficial; otro, para cuello uterino, y el tercero es el Theratron, para diversos tipos de radioterapia. Este último presenta problemas y necesita constantes reparaciones.
Guerra destacó que si no consiguen reemplazar sus aparatos de inmediato, se verán obligados a cerrar la Unidad de Radioterapia. El equipo es de unos 30 años de antigüedad.

Sólo por estos inconvenientes el Incan tiene ahora unos 80 enfermos en lista de espera.
El problema es que un paciente necesita una dosis de radiación constante; no se puede aplicar una cantidad ahora y otra cuando el aparato funcione, explicó el facultativo.
La situación actual ha obligado a uno de los médicos del hospital a llevar pacientes, por el mismo precio del Incan, a su clínica privada.

Guerra visitó hace dos días a James Derham, embajador de Estados Unidos en Guatemala, para pedirle ayuda en la adquisición de equipo nuevo.
“Lo ideal sería contar con un acelerador lineal, lo más avanzado en equipo para radioterapia”, explicó el médico.

De momento, el diplomático le ofreció ponerlo en contacto con instituciones en Estados Unidos que podrían ayudar.

Rafael Barrios, presidente de la Comisión de Salud, del Congreso, expresó que hoy su bancada (Partido de Avanzada Nacional) presentará una propuesta a la Comisión de Finanzas, de ese organismo, para que dentro de la ampliación presupuestaria al Ministerio de Salud sean incluidos Q10 millones para el Incan.

Barrios señaló que, a pesar de la labor que desempeña ese instituto, es una entidad abandonada.
Guerra reiteró que se debe hacer un esfuerzo por crear hospitales de cancerología en la provincia, con sus propios equipos de radioterapia.

De lo contrario, apuntó, en el año 2025 Guatemala tendrá una epidemia de cáncer.