13 abr 2009

Un poquito de Benedetti nunca cae mal


Soledades

Ellos tienen razón
esa felicidad
al menos con mayúscula
no existe
ah pero si existiera con minúscula
sería semejante a nuestra breve
presoledad
después de la alegría viene la soledad
después de la plenitud viene la soledad
después del amor viene la soledad

ya sé que es una pobre deformación
pero lo cierto es que en ese durable minuto
uno se siente
solo en el mundo
sin asideros
sin pretextos
sin abrazos
sin rencores
sin las cosas que unen o separan

y en esa sola manera de estar solo
ni siquiera uno se apiada de uno mismo
los datos objetivos son como sigue

hay diez centímetros de silencio
entre sus manos y mis manos
una frontera de palabras no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla así de triste
entre tus ojos y mis ojos
claro que la soledad no viene sola

si se mira por sobre el hombro mustio
de nuestras soledades
se verá un largo y compacto imposible
un sencillo respeto por terceros o cuartos
ese percance de ser buenagente

después de la alegría
después de la plenitud
después del amor
viene la soledad

conforme
pero
qué vendrá después de la soledad

a veces no me siento
tan solo

si imagino
mejor dicho si sé
que más allá de mi soledad
y de la tuya

otra vez estás vos
aunque sa preguntándote a solas
qué vendrá después
de la soledad

Mario Benedetti, Poemas de otros, Editorial Sudamericana, Tercera Edición, 2001, pág. 66

5 comentarios:

Diego dijo...

saludos
muy buen blog sigue asi
psa al mio

http://dangaliot.blogspot.com/

nos vemos

Ale Ruiz dijo...

Amo a Mario Benedetti. Te recomiendo leer Primavera con una Esquina Rota, es uno de los mejores libros que he leído. Saludos.

Cristian Mejía dijo...

Buenisimo! Me toco la felicidad efimera de mi día y luego: la soledad. Saludos y que la semana santa te haya sentado bien. Saludos.

Anónimo dijo...

Con Benedetti nunca se puede quedar mal.

Penn dijo...

Soledad... increíble sentimiento. Estar acompañado pero al final solo. Vivir como un fantasma, no?? todos afuera viéndonos, hablándonos, escuchándonos balbucear lo que aún sale de nuestra garganta... aún así solos. Y por qué será que uno se siente solo aún cuando "sabe" que hay alguien más allí??