Al fin, pensando algo en algo

No voy a mentirles, desde que gané el privado a mediados de noviembre he leído poco, he viajado poco, he visto a poca gente y peor aún, he pensado muy poco en cualquier cosa que no sea descansar. El descanso está bien por un fin de semana, una semana máximo, pero luego el cuerpo y mente entran en un estado de letargo, de parálisis completa, que apenas algunas reuniones y dos o tres quehaceres han distraído. El resto del tiempo me la he pasado en la peor inercia de todas, la de no hacer nada.

El no hacer nada y estar a punto de celebrar Navidad con la familia y Año Nuevo con los amigos ha dejado el campo abierto para realizarme ciertas preguntas, algunas importantes pero que no son urgentes y otras urgentes e importantes, hablo de variados temas, desde volver a salir con una chava y ver que pasa, la eterna guerra con el gimnasio, la carrera, la tesis, el trabajo, los amigos y los cambios personales que implica ya ser una persona "grande", me refiero a "respetable" y "formal".

Con respecto a las chavas me he vuelto a dar cuenta que no es que existan malas chavas exclusivamente, manipuladoras, egoístas o simplemente locas; está el caso en que me he puesto a pensar que tanto yo como persona me he dejado influenciar por mis pasadas experiencias y no he aprendido a relacionarme con mujeres que valgan la pena, eligiendo ultimadamente el beneficio a corto plazo sin tomar en cuenta ninguna clase de futuro.

Es lo que alguna vez me dijeron y seguro se los han dicho o han soltado ustedes, la frase "no eres tu, soy yo" y ahora aplica a que probablemente en mi caso sea cierto. No son ellas, soy yo el que una vez más no sólo estoy aterrado por el miedo al rechazo sino que tampoco puedo confiar en mí mismo y mis reacciones más inmediatas, es como que si la voluntad de luchar y triunfar se hubieran esfumado con el haber alcanzado la meta de ganar el examen privado.

Ya ni puedo recurrir a la melancolía, esta ya se murió con el tiempo y las nuevas experiencias, tampoco puedo refugiarme en la seguridad de las excusas ni los pretextos, simplemente tengo que encontrar la fuerza mental y la motivación para volver a lanzarme al ruedo, afinar lo afinable y fortificar posiciones, no volver a dejar nunca más que me saquen de mis casillas, no dejar que la gente me pase por encima y ni siquiera prestarme al chisme, a la crítica ni a los comentarios maliciosos. Por que cuando uno es negativo, las cosas y las personas que a uno lo rodean tarde o temprano son negativas y lo llegan a desestabilizar a uno, la lucha constante y la poca fé que he tenido en mí mismo desde hace algún tiempo sobre muchos aspectos de mi vida me tienen paralizado.

El tomar las riendas de la propia vida, el abrir la puerta para que nuevas personas e ideas entren y desplazen lo viejo o inútil muchas veces puede ser beneficioso, simplemente creo que he tomado ciertas desiciones que me van a traer consecuencias duras, pero sobre todo que serán necesarias si quiero estabilizarme por que el próximo 2009 se viene lleno de más esfuerzo, más sacrificios y más oportunidades.

Reflexionando y analizándose uno mismo es como simplemente se encuentra la realidad y la sustancia del interior, de lo real, de lo sincero, estos días pueden servir para volver a la realidad de una forma más pensada, más segura y más equilibrada y sobre todo, no puedo dejarme llevar por la corriente ni quedarme de brazos cruzados mientras mi vida transcurre en este marisma de paz aparente.

Ya no puedo seguir así.