Escrito en respuesta a la noticia publicada hoy en El Periódico de Guatemala, firmada por Claudia Méndez Villaseñor.
Afortunadamente sólo un paso fronterizo en Jutiapa y 3 bellas pinturas es lo que directamente queda relacionado con ese gran y despiadado asesino que fue Alvarado, al menos no se les ha ocurrido hacerle estatuas o nombrar calles y pasos a desniveles en su honor o que salga en monedas y billetes.
Pero eso es lo de menos, el que Arzú o Espada tengan o hayan tenido colgado semejante retrato, de tal explotador, el temido Tonatiu que casi hizo fracasar la conquista de Mexico por Cortez con sus desmanes y vino a Guatemala a esclavizar y robar, mas que un souvenir u obra de arte, es la pervivencia de la mentalidad criolla, tan bien descrita en la Patria del Criollo, tanto Espada, como obviamente Arzú se creen herederos de tan malvado personaje histórico.
Además, ese cuento de “Es importante porque lo reconoce como el fundador de la ciudad y de introducir el régimen municipal al país”, no es tal, lo de la ciudad si claro, necesitaba un campamento militar donde centralizar su poderío, pero nunca le interesó esta tierra, el quería oro, por eso malgastó mucho dinero en una flota para el Perú que paró revendiendo una vez llegado por allá y murió en México sin gloria.
Lo de imponer el regimen municipal, es en realidad decir: apoyó ese poder criollo que junto con el de los funcionarios españoles mantuvo dominado política y económicamente al nativo y luego a los mestizos y mulatos. Una verguenza.
El mas sanguinario de todos los conquistadores que vinieron a América.
Dibujo tomado de aqui: http://www.laguia2000.com/mexico/la-matanza-del-templo-mayor
1 comentario:
Yo estoy convencido de que el cuento de los espejitos es falso. Nuestros antepasados tenían tanto conocimiento en diversas ciencias que no iban a ser engañados con unos espejos. Lo que hicieron fue una masacre, encabezada por Pedro de Alvarado.
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